Para este DIY necesitaremos:
- Tela, nosotras hemos elegido una tipo chenilla, así será un cojín resistente.
- Hilo.
- Tiza para marcar.
- Tijeras o cúter rotatorio.
- Si eres principiante, ganas y paciencia !!
El primer paso consiste en cortar un cuadrado de tela, del tamaño que queramos nuestro cojín. Este trozo de tela será el frontal de nuestro cojín. A continuación cortamos otras dos piezas del mismo ancho que la primera pero que la altura sea 3/4, es decir, mismo ancho que el frontal pero 1/4 menos de longitud. Estas dos piezas tendrán forma de rectángulo, con las partes iguales dos a dos.
A los dos rectángulos les remallaremos uno de los lados más largos y cuando lo tengamos cosemos un dobladillo de 1 cm de ancho aproximadamente. Esto es porque esta parte va a quedarnos a la vista en la parte trasera de nuestro cojín.
Una vez que tengamos hechos los dos dobladillos, colocamos las dos piezas rectangulares enfrentadas con el frontal. La primera alineada con la parte inferior del frontal y la segunda alineada con la parte superior , quedando encima de las otras dos. El resultado será como la foto de la derecha, las dos partes más pequeñas quedan solapadas y formarán el cierre de nuestro cojín.
Una vez tengamos las tres piezas colocadas, podemos sujetarlas con alfileres para que no se nos muevan, y empezamos a coser todo el contorno del cojín.
Para terminar, es aconsejable remallar todo el contorno porque este tipo de telas se despeluchan mucho y así evitamos que se nos estropeen las costuras.
Ya sólo nos queda dar la vuelta al cojín, meter el relleno y empezar a disfrutar de él....Pinafili ya está en ello.
Esperamos que os haya gustado y os animéis a hacer uno. Si tenéis cualquier duda, no os quedéis con ella y escribidnos a pinafili@gmail o animaros a dejar un comentario.
Podéis ver AQUÍ otro modelo de cojín usando la misma técnica.
Os deseamos un feliz comienzo de semana.
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